Isaac J. Pardo

Sinopsis

Antes de morir, el Presidente Carlos Soublette le recomendó a sus hijos: «Váyanse de Venezuela y no regresen nunca más porque esto no tiene composición». Uno de ellos, Evaristo, se radicó en Chile, casó con chilena, tuvo seis hijos, entre ellos, Amelia. En un viaje circunstancial a Chile, el venezolano Jacobo Pardo se enamoró de Amelia Soublette. De esa unión nació Isaac J. Pardo Soublette, biznieto del Presidente más tolerante del siglo XIX.

Pardo perteneció a la generación del 28. Optó por el exilio, se graduó de médico en España. Cuando en 1948, los militares sublevados hicieron prisionero al Presidente Gallegos, él era el único amigo que lo acompañaba. Hombre de gran cultura y rigurosa formación humanística, disfrutaba del humor y de la irreverencia. Con Miguel Otero Silva, Andrés Eloy Blanco y Aquiles Nazoa transitó la aventura de El Morrocoy Azul.

María Ramírez Ribes tuvo el privilegio de entrevistarlo. En esas conversaciones el escritor recuenta su vida y evoca el mundo en que vivió. Entre sus obras se destacan Descubrimiento y conquista de Venezuela, Esta Tierra de Gracia y Fuegos bajo el agua. La invención de la Utopía. Es la obsesión de Utopía el nexo más poderoso que vinculó a Ramírez Ribes con Pardo. Tratando de descifrar utopías, María quiso penetrar su vida; escribió esta biografía donde la reflexión profunda corre paralela al humor e ironía de un hombre sabio. Isaac J. Pardo estuvo vinculado con El Nacional desde su fundación en 1943. Durante los años 50 fue Presidente de la Junta Directiva. El capítulo «El Nacional y las presiones de la dictadura» relata fragmentos de esa historia, tal como lo refería al rememorar los reiterados asedios de la dictadura en su incesante batalla contra la libertad de expresión. Lo que Pardo llamó «pelea de burro contra tigre»

Simón Alberto Consalvi

Caracas, 2007.