Título: Manuel Antonio Carreño
Autora: Miriam Alcibíades
Colección: Biblioteca Biográfica
Venezolana, volumen 12
Editorial: El Nacional / Bancaribe,
Caracas, primera edición 2005, Editorial Arte
Número de páginas: 130
Formato: pdf
«…Estaba, y estoy convencida de que el autor del Manual de urbanidad y buenas maneras es de la estirpe de venezolanos a quienes hay que conocer, porque la vida que llevó es una puerta franca para asomarse a los avatares, aciertos, sinsabores y plenitudes del siglo XIX venezolano». Así valora Mirla Alcibíades a don Manuel Antonio Carreño, el personaje cuya vida, aventuras y desventuras, indaga en esta espléndida biografía. Estas páginas exploran los signos predominantes de su personalidad, su legado y su contribución al desarrollo de la cultura venezolana en distintos órdenes. Carreño no fue sólo el autor del Manual de Urbanidad y buenas maneras, (un best-seller del siglo XIX en Venezuela y en el extranjero), sino que se destacó como músico, escritor, periodista y pedagogo notable e, incluso, ministro de Hacienda; fundador, además, de uno de los colegios más prestigiosos de entonces, el colegio «Juan Germán Roscio», donde ejercieron como profesores el escritor Juan Vicente González y el pintor Carmelo Fernández. En 1862 viajó a París para ocuparse de la educación de Teresa, logrando con éxito indudable una de sus más grandes ambiciones. En esa ciudad murió doce años después, en 1874. Carreño fue protagonista de una época de cambios sociales y culturales. Alcibíades estudia la dilatada oferta promocionada en periódicos y revistas en materia de modas, el gusto culinario, bebidas refinadas y exóticas, peluqueros, zapaterías de estilo, joyeros; en una palabra, la coquetería femenina y, también, la masculina. Gran investigadora, especialmente del inexplorado mundo del siglo XIX venezolano, Alcibíades nos conduce por los avatares de toda una época como antes lo hizo con su excelente obra La heroica aventura de construir una república. Familia-nación en el ochocientos venezolano (1830-1865).
Simón Alberto Consalvi
Caracas, 2005